115: Directo a la nada

Una de las joyas de la cinematografía infantil de los 80s… Pero nunca entendí demasiado por qué el dragón tenía cara de perro. Bah, más bien por qué decían que era un dragón si era un perro largo que volaba. Todavía algunos días me despierto sudoroso con los ojos llenos de lágrimas y gritando «¡Atreiuuu!».

049: Gente pequeña

A veces es fatal escuchar algunas conversaciones muy tontas de la gente en espacios públicos… y a veces es una fatalidad inevitable porque hablan a los gritos. Hoy en Starbucks un grupo de chicas planificaba la gráfica de algún tipo de libro o revista de la manera en que sólo alguien que no sabe de gráfica puede hacerlo, eligiendo y opinando sobre colores, tipografías y propuestas visuales. En un momento sublime una de las chicas (la que gritaba) llama al «diseñador gráfico» (pobre) para preguntarle si sabía cómo hacer que un dibujo (la silueta de una guitarra) pareciera hecho con neón azul o violeta. Le hace la pregunta y ante la respuesta consulta al grupo «¿Alguna sabe usar Photoshop?» Ninguna. Y sigue por teléfono: «¿Se puede hacer en azul o violeta el neón?»

015: Dragón entrándole a milanga

Hoy ví la película «7 Pounds», con Will Smith, donde en un comentario que no tiene nada que ver con el resto de la película Rosario Dawson menciona que le gustan los dragones, y más aún los dragones en el espacio. A falta de algo mejor, tuve la idea para este dibujo que salió en una línea bien de ilustración infantil (digo yo).

Le dí buen uso a mi caja de lápices Mars Lumograph y debe ser la primera vez (en mi vida, ever) que aprovecho los distintos tipos de mina (8B, 4B, 2B, HB y 4H). Estoy conforme con el resultado y a diferencia de lo que suele pasar, me gusta más el original que la versión digital… el lápiz no se escanea tan bien.